Las tecnologías digitales han revolucionado los métodos de enseñanza, las dinámicas de comunicación entre estudiantes y profesores y el acceso a la información. Enseñar a nativos digitales presenta una serie de desafíos, especialmente en términos de la escala y presencia que dicha tecnología debe tener en las escuelas.
Aunque algunos estudios advierten que la exposición a pantallas antes de los dos años puede afectar al desarrollo cognitivo y del lenguaje, lo cierto está por determinar si esto se debe al uso de pantallas (o cómo y qué pantallas se utilizan) u otros factores como el nivel socioeconómico. Parece claro que el impacto de las pantallas en los niños es complejo y transversal a otros factores de sus vidas.
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Diversos estudios apoyan la integración de algunas herramientas tecnológicas en el aula, argumentando que fomentan un aprendizaje más interactivo y promueven el desarrollo de habilidades digitales. Además, creen que ofrecen a los padres y, sobre todo, a los profesores nuevas formas de obtener información sobre el progreso de sus alumnos y así adaptar mejor sus estrategias de enseñanza.
Comprender mejor cómo afecta el uso de las nuevas tecnologías al aprendizaje, con el fin de maximizar sus beneficios y minimizar sus posibles efectos negativos, es lo que intentamos con nuestra reciente investigación sobre el uso de asistentes robóticos para el aprendizaje de vocabulario en una segunda lengua en el grupo de edad de 4 a 6 años.
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Aprende inglés para niños
Sabemos que aprender una lengua extranjera no sólo abre oportunidades académicas y comerciales, sino que también estimula el desarrollo cognitivo, fortalece la memoria y mejora las habilidades comunicativas. En el caso de los niños pequeños, el reto es captar su atención, despertar su curiosidad y mantener su interés.
Para ello, los profesores deben desarrollar métodos creativos y recursos innovadores. Aquí, los robots asistentes toman protagonismo para convertirse en aliados de los docentes en sus estrategias didácticas.
Los robots asistentes en la educación se presentan como soluciones prometedoras. Estos molinos no buscan sustituir el trabajo de los docentes, sino complementarlo, integrando los métodos educativos tradicionales en las aulas.
Habilidades lingüísticas
Los asistentes robóticos pueden apoyar las habilidades lingüísticas de los niños, como la comprensión verbal y la comunicación mediante gestos.
La fase del 4to al 6to año es crucial en el desarrollo del lenguaje, pues en ese período los niños consolidan la base lingüística que les permitirá desarrollarse adecuadamente en el ámbito educativo, social y posteriormente laboral. Se ha demostrado que la exposición a un entorno bilingüe durante esta etapa mejora la adquisición de una segunda lengua.
Una de las áreas donde más pueden contribuir los robots asistentes es la adquisición de vocabulario, al crear diferentes contextos de comunicación, haciendo que el aprendizaje sea más dinámico y atractivo para los niños.
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Robots asistentes para vocabulario en inglés.
Investigamos cómo un asistente robótico puede mejorar el aprendizaje de vocabulario en inglés en niños de esta edad cuya primera lengua es el español. La investigación se llevó a cabo en dos jardines de infancia con un total de 40 niños, divididos en dos grupos. Evaluamos tanto la adquisición de nuevas palabras como la capacidad de los niños para formar oraciones.
El robot desarrollado por nuestro equipo cuenta con micrófono, parlantes y una interfaz amigable que simula expresiones faciales para facilitar la comunicación con los más pequeños.
23% más vocabulario
Los resultados muestran que el robot crea un entorno de aprendizaje más interactivo y motivador, lo que facilita la adquisición de nuevo vocabulario. Los niños que interactuaron con el robot aprendieron un 23% más de palabras que los que siguieron los métodos tradicionales, especialmente durante los primeros meses de exposición. Además, no sólo aprenden palabras, sino que también participan más activamente en las actividades.
El estudio también destacó algunos desafíos. Muchos niños se distraían fácilmente con el robot, lo que requería una supervisión constante por parte del maestro. Además, padres y profesores coincidieron en las encuestas en que gracias a la presencia de robots asistentes, los niños se integran más fácilmente en la rutina escolar y aumenta su interés y motivación por aprender. Específicamente para docentes, es una herramienta de apoyo, fácil de utilizar e integrada en el aula como una herramienta didáctica más.
La clave es integrar la innovación como una ayuda educativa, capaz de acompañar tanto a los niños en su aprendizaje como a los profesores en su trabajo.
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