¿Sabías que una camiseta de algodón consume unos 2.700 litros de agua, aproximadamente la cantidad que bebe una persona en tres años? La moda rápida puede ofrecer ropa barata y de moda, pero también genera 12 kg anuales de residuos textiles por persona en Europa, de los cuales sólo el 1% se recicla para fabricar ropa nueva.
La industria de la moda rápida es demasiado rápida y demasiado barata, pero hay formas de frenarla: en los últimos años, la UE y los países europeos han comenzado a proponer e implementar impuestos y leyes que lo hacen.
UE: No más exenciones fiscales para el modo rápido
En 2021, millones de paquetes con plataformas como Shein y Theme -todos ellos con un valor inferior a 22 €- llegaron a Europa sin pagar IVA. Les dio una ventaja injusta sobre las empresas locales, pero a partir de 2021. Todas las importaciones de fuera de la UE están sujetas al IVA.
La Comisión Europea quiere seguir adelante y propuso una tasa de tramitación de 2 € por cada envío en la UE. También quiere eliminar la electricidad en la importación de tarifas arancelarias por valor de 150 €, por lo que incluso los pedidos pequeños tendrán que pagar aduanas.
Estas medidas evitarían que los vendedores de fuera de la UE dividieran artificialmente los pedidos y fortalecerían el control de productos que a menudo se producen en condiciones insostenibles o malas prácticas laborales. El impacto podría ser enorme; En 2024, el 91% de todos los envíos de comercio electrónico por valor inferior a 150 € procedieron de China.
En 2024. año, Bruselas aprobó la Directiva (UE) 2024/825 para luchar contra la Vía Verde. A partir de 2026, las marcas no podrán presentar “carbono neutral” o “ambientalmente amigable” sin evidencia verificada, ni podrán ocultar información sobre la durabilidad o reparaciones de la ropa.
A LIRE AUSSI: Cómo Marketing Wake Market permite que las marcas de moda rápida se enfrenten al abuso y la fuerza laboral
Francia: Impuesto por ropa de moda rápida
Francia es el primer país europeo que ha aprobado un impuesto a la moda rápida: en junio de 2025, el Senado francés dio luz verde a la ley que introdujo un sistema penal progresivo por prenda. Las marcas de moda ultrarrápida tendrán que pagar 5 euros adicionales por artículo, lo que encarecerá especialmente cosas como camisetas, vestidos y pantalones baratos. La cifra irá aumentando paulatinamente hasta los 10 euros en 2030. Duplica los impuestos en apenas cinco años.
El impuesto dependerá de la influencia y práctica de cada empresa y no excederá el 50% del precio de venta sin IVA.
Con esta medida, el gobierno francés envía un mensaje claro: la ropa extremadamente barata, diseñada para durar apenas una temporada, debe pagar los daños causados. Al mismo tiempo, marcas que producen ropa más duradera y que se puede reciclar con una menor huella en la protección del medio ambiente. Este modelo se inspira en el impuesto medioambiental que ya se aplicaba al combustible y al plástico.
A Lire Aussi: El modo ultrarrápido podría pagar impuestos por olvido en Francia. ¿Podría Australia hacer lo mismo?
Reino Unido: Penny en ropa
En 2019, el Comité del Parlamento Británico recomendó un impuesto de un centavo por cada prenda vendida para financiar la recolección y el reciclaje de textiles.
Aunque el Gobierno no tomó ninguna medida, la propuesta provocó un debate sobre el enfoque político de la responsabilidad ampliada de los fabricantes, siendo las marcas las que pagan en función de los residuos que generan. Menor calidad de sus productos, mayor precio; Cuanto más duraderos y reciclados tengan que pagar menos.
Suecia, Países Bajos y Francia: reparar en lugar de sustituir
Otros países han decidido fomentar las reparaciones. En Suecia, el IVA sobre la reparación de prendas de vestir y calzado disminuyó del 25% al 12%, mientras que en los Países Bajos, la tasa reducida del 9% se refiere a servicios como costura, exhibición y reemplazo de tallas.
En Francia, a partir de 2025, se aplicará un tipo reducido del 5,5% al textil y al calzado, junto con el “bono de reparación”, que descuenta parte de los costes de los consumidores que reparan su ropa en talleres certificados.
Estas medidas tienen un objetivo claro: hacer que sea más barato sustituir la cremallera rota que comprar ropa nueva.
A LIRE AUSSI: Cómo hacer que el centro comercial sueco cambie “segundos” al comercio minorista
España: Regulaciones avanzadas, rezago fiscal
En España, la Ley 7/2022 prevé que, a partir de 2025, las marcas textiles deberán financiar sistemas de recogida y reciclaje y facilitar información sobre la durabilidad y reparación de sus productos. Se trata de un paso adelante porque obliga a las empresas a asumir los costes que hasta ahora han cubierto a las autoridades locales y a los contribuyentes.
Sin embargo, la fiscalidad sigue siendo el principal desafío. Aún no se han adoptado impuestos o incentivos fiscales como los de Francia, Suecia y Países Bajos, lo que deja a España rezagada en este ámbito.
¿Funcionan estas medidas?
Los efectos de los mecanismos tributarios ya se están sintiendo. La eliminación de exenciones niveló la reproducción y obligó a la gran plataforma internacional a cambiar sus precios y estrategias logísticas.
Las reparaciones con IVA reducido revitalizan los talleres locales, benefician al pequeño comercio y cambian paulatinamente los hábitos de los consumidores. Los nuevos impuestos, como los de Francia, encarecerán la ropa desechable, obligando a las grandes marcas a mejorar su diseño, trazabilidad y materiales.
Juntos, los impuestos y las regulaciones buscan cambiar la lógica de la industria textil. Las prendas baratas y de una sola vez deberían dejar de ser la opción más atractiva y la reparación, reutilización o compra de ropa de calidad debería convertirse en una norma. Si se consolidan estas medidas, la industria textil europea podría convertirse en una de las más avanzadas en términos de sostenibilidad, posicionando a Europa como líder mundial en la lucha contra la moda rápida.
Descubre más desde USA Today
Suscríbete y recibe las últimas entradas en tu correo electrónico.

